El tradicional rascador para juntas Rubí, con un mango ergonómico y con dos plaquetas de carburo de tungsteno electrodepositado de gran resistencia a la abrasión.
Estas plaquetas son combinables con 1, 2 o 3 plaquetas según sea el ancho de la junta de colocación que haya que vaciar.
Cada plaqueta de carburo de tungsteno electrodepositado tiene un grosor de 2 mm, por lo que la junta mínima para trabajar con este rascador es de 2 mm, pudiendo llegar hasta los 6 mm de ancho de junta de colocación.
El rascador de juntas Rubí es muy práctico para los trabajos de reparación en los que tengamos que sustituir unas pocas baldosas de cerámica.
Vaciando la junta de colocación antes de la sustitución de las baldosas de cerámica rotas, reduciremos el riesgo de dañar las baldosas perimetrales que se encuentren en buen estado.
Y de la misma forma, ganaremos espacio para colocar las piezas nuevas, que podrían tener pequeñas diferencias dimensionales, si pertenecieran a distintas partidas de producción o a fabricantes distintos.
Jaime (propietario verificado) –
Buena compra precio y rapidez.
Jacobo (propietario verificado) –
Todo ok como esperaba