Todos pensamos que entendemos para qué sirven los alicates, pero lo que ocurre es que solo conocemos uno o dos tipos, sin saber que hay una enorme cantidad de ellos con funciones diferentes, y algunas de ellas muy específicas.
Conviene entender todos sus usos, pues a nivel profesional tener el adecuado nos sacará de más de un apuro por poco dinero, ya que, como se puede comprobar en nuestra tienda, no son caros.
Funciones de los alicates
Cada uno de los tipos de alicates tienen funciones distintas, la cual viene determinada por la forma de la punta, ya que los mangos suelen ser muy similares.
Alicate universal
Si preguntamos por los alicates, y para qué sirve cada uno, seguro que a todo el mundo se le viene uno de este tipo a la cabeza y nos dirán que con el fin de sujetar.
Su característica principal es que con él podemos hacer casi de todo: doblar cables, apretar chapas, anillas, tirar de cualquier cosa, aflojar una unión que se nos resiste, etc. Posee una mordaza muy fuerte, con una parte dentada en la zona media que ayuda a que agarre mejor. A su vez, en el punto inferior de la tenaza, suele llevar una cuchilla afilada que sirve para cortar alambres, cables, etc.
Alicates de corte
Este es de uso casi exclusivo de los electricistas y los hay de varias clases, dependiendo de cómo tengan las tenazas, e incluso algunos llevan un muelle entre el mango, lo que los hace muy prácticos.
No son tenazas, ya que las puntas son en realidad cuchillas de acero, por lo que si intentamos aferrar algún material con ellos lo cortaremos o lo marcaremos, dependiendo de su dureza.
Alicates de punta
A veces hay que sujetar piezas pequeñas o incluso cogerlas en sitios de difícil acceso. En esos casos, el alicate universal no sirve, puesto que la tenaza no entra y por eso se usa el de punta, con una pinza larga y muy delgada.
Es uno de los mejores para trabajar con cables y alambres, siempre que no haya que cortarlos, pues este alicate no tiene cuchilla para hacerlo.
Cuando vamos a manipular piezas pequeñas siempre conviene tenerlo cerca, pues antes o después lo necesitaremos, en especial si no podemos cogerlas con las manos porque las nuestras son demasiado grandes.
Alicates de punta redonda
La profesión de electricista es una de las que más alicates hechos a medida posee, y otro de los que utilizan son los de punta redonda, que son iguales a los anteriores y solo se distinguen en la punta de la tenaza, en donde tienen dos piezas cilíndricas.
Van muy bien a la hora de hacer cerramientos con alambre o doblarlo y también cuando hay que trabajar con cables eléctricos, aunque este gremio no es el único que se beneficia de él.
Los artesanos que hacen collares, pulseras, etc., también lo usan a menudo, pues facilita mucho dar forma a las piezas de pequeño tamaño que manipulan.
Alicates de punta curva
Se trata de otra de esas herramientas muy especializadas, de las que solo tienen un uso. En concreto, estos alicates de punta curva se emplean en los talleres mecánicos si tienen que montar y desmontar los anillos de retención.
Estos anillos sujetan muchas piezas y a la hora de retirarlos hay que estirarlos o apretarlos, lo que se hace de una forma muy sencilla gracias a este alicate, que es posible adquirir con las pinzas a medida de cada uno de los anillos con los que se trabaja.
Pico de loro
A esta pinza o alicate se le conoce con el nombre de pico de loro porque se asemeja mucho al de este animal, y su principal característica es que tiene una articulación que se puede ir moviendo con el fin de cambiar la apertura de la pinza.
Asimismo, con una herramienta vamos a hacer muchos trabajos, aunque lo cierto es que se emplea bastante a la hora de bregar con tuercas, tornillos y en fontanería.
Alicate de presión
Otra pinza o alicate muy específica es el alicate de presión, el cual tiene un mecanismo en el mango, cuya finalidad es que una vez que sujetamos las piezas lo podamos bloquear para que nuestras manos queden libres.
De este modo, nos da la posibilidad de unir dos piezas para atornillarlas, hacer agujeros, soldarlas o lo que se nos ocurra sin la ayuda de nadie más, pues gracias a él es como si tuviésemos otro par de manos disponibles en todo momento.
Una vez que sabemos para qué sirven los alicates, ya podemos adquirir aquellos que mejor se adapten a nuestro trabajo.
En nuestra tienda de herramientas, puedes encontrar de todos los tipos, y, dado los precios que tienen, conviene tener al menos uno de cada, pues nunca se sabe cuándo nos serán de ayuda o nos pueden sacar de un buen apuro.
